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Blog

Certamen Literario Nacional XXIV Juegos Florales de San Marcos, Ocotepeque

 

Dedicados a la
Sociedad Literaria de Honduras
En su 45° aniversario

La Corporación Municipal de San Marcos, Ocotepeque, y la Comisión Organizadora de los XXIV Juegos Florales, con el propósito de contribuir al fomento de la cultura, el arte y las bellas letras, convocan a todos los interesados a participar en el certamen del género de Poesía.

BASES

1. Podrán participar todas las personas de nacionalidad hondureña que así lo desee, con obras que deberán ser inéditas, no premiadas en otros concursos pasados o en vigencia incluyendo los Juegos Florales de San Marcos, Ocotepeque.

2. Los trabajos se presentarán impresos a doble espacio en una sola cara con letra tipo Times New Roman No. 12, en papel blanco tamaño carta, márgenes de 2.54 centímetros o una pulgada, en original y cuatro copias.

3. La pulcritud ortográfica es indispensable, de manera que se descalificarán todas aquellas creaciones poéticas que contengan errores que contravengan las reglas básicas de la ortografía castellana; como por ejemplo, acentos mal colocados o la falta de ellos, palabras mal escritas, etc.

4.  Los trabajos tendrán una extensión mínima de 14 versos y una extensión máxima de 84 versos repartidos en un solo poema o en varios poemas, los cuales se distribuirán en un número no mayor de cinco páginas.

5. Los temas serán libres y el estilo de versificar también, que tenga musicalidad interna, lenguaje entendible y figuras literarias adaptadas a las corrientes actuales.

6.  Se otorgarán los premios siguientes:

* Primer Premio: flor, medalla de oro, siete mil lempiras (L. 7,000.00) en efectivo y diploma de honor.
* Segundo Premio: Medalla de plata, seis mil lempiras (L. 6,000.00) en efectivo y diploma de honor.
* Tercer Premio: Medalla de bronce, cinco mil lempiras (L. 5,000.00) en efectivo y diploma de honor.

7.  Los trabajos deberán ser identificados únicamente por el seudónimo. En sobre aparte se consignará: Título del trabajo, seudónimo, nombre del autor y un resumen de su hoja de vida, así como su dirección exacta, correo electrónico y número telefónico.

8.  Los trabajos deberán remitirse a:
Lic. Domingo Valle Pineda
Comisión Organizadora de los XXIV Juegos Florales
San Marcos, Ocotepeque
Tel. 2663-4197; Cel. 9948-2495

9. La fecha límite para la recepción de los trabajos es el viernes 30 de agosto de 2013 y el fallo se dará a conocer en la primera quincena de octubre, haciéndose entrega de los premios el sábado 26 de octubre en acto solemne.

10. Es obligatorio que los galardonados se hagan presentes a recibir el premio. Única y exclusivamente a ellos se les reconocerán los gastos de transporte, hospedaje y alimentación.

Comisión Organizadora
XXIV Juegos Florales de San Marcos, Ocotepeque

 

Última actualización el Miércoles, 24 de Julio de 2013 14:30
 

La historia del cacique Lempira

El cacique Lempira

Lempira fue un importante líder de la resistencia indígena contra la dominación española. Su zona de operaciones fue un extenso y áspero territorio en la mitad sur de lo que ahora es el departamento de Lempira en Honduras.

El cronista Antonio de Herrera describe a Lempira —cuyo nombre significa ‘Señor de la Sierra’— como “de mediana estatura, espaldudo y de gruesos miembros, bravo y valiente y de buena razón, nunca tuvo más de dos mujeres y murió de 38 a 40 años”.

En el año de 1537, después de la muerte del cacique Entepica, de quien fue lugarteniente, Lempira logró convocar a 200 pueblos para que pelearan unidos contra los españoles, incluyendo a la tribu de los Cares, tradicionales enemigos de la tribu de los Cerquines a la que pertenecía Lempira.

Lempira logró persuadir a 30,000 hombres para luchar por su libertad, y ofreció ser su capitán para conducirlos a la victoria, prometiendo afrontar los mayores peligros, porque consideraba inaceptable que tantos hombres valientes fueran sometidos por unos pocos extranjeros.

Los guerreros se posicionaron en sitios altos y fortificados, llamados “peñoles” por los españoles, a los que conducían a toda la comunidad con abundantes provisiones.

Los principales peñoles de la alianza indígena fueron el cerro Gualapa, el pico de Congolón, el cerro de Coyocutena, el Peñón de Cerquín, el cerro de El Broquel y las lomas de Gualasapa.

Pero el atrincheramiento más importante fue sin duda el Peñón de Cerquín, dirigido por el propio Lempira. El gobernador español de la provincia, Francisco Montejo, entendió que si se quería avanzar en el proceso de la conquista había que apoderarse de esta fortaleza, para lo cual designó al capitán Alonso Cáceres, quien con sus hombres sitió al peñol durante seis meses; pero los indios —que estaban con sus mujeres e hijos bien aprovisionados de víveres— resistieron valientemente el sitio, causando numerosas bajas españolas con sus fechas provistas de agudas piedras de pedernal.

Viendo la valiente resistencia indígena el capitán Alonso Cáceres decidió tomarse la fortaleza por medio de la traición. Para ello dispuso que un soldado se aproximase con su caballo a una roca donde Lempira estaba de pie, y que, mientras le hacía proposiciones de paz, otro soldado cabalgando a la grupa, le disparara con su arcabuz. La estratagema se cumplió al pie de la letra, y al morir el capitán indígena, la numerosa tropa que lo acompañaba se dispersó por los montes, y poco después se rindió a los españoles.

El cronista Herrera narra así el episodio de la traición: “el capitán Cáceres ordenó que un soldado se pusiese a caballo, tan cerca que un arcabuz le pudiese alcanzar de puntería, y que este le hablase, amonestándole, que admitiese la amistad que se le ofrecía; y que otro soldado estando a las ancas, con el arcabuz le tirase; y ordenado de esta manera, el soldado trabó su plática y dijo sus consejos y persuasiones, y el cacique le respondía que ‘la guerra no había de cansar a los soldados ni espantarlos, y que el que más pudiese vencería’; y diciendo otras palabras arrogantes, más que de indio, el soldado de las ancas le apuntó cuando vio la ocasión, y le dio en la frente, sin que le valiese un morrión, que a su usanza tenía, muy galano y empenachado”.

Por tradición se sostiene que Lempira cayó en el sitio de Piedra Parada, cerca de el Pico Congolón, aunque también hay otro sitio conocido como Piedra Parada cerca de Erandique; pero las investigaciones en el terreno conducen a pensar que el héroe indígena pereció en el propio Peñón de Cerquín.

El historiador hondureño Mario Felipe Martínez ha puesto en duda la versión de la muerte de Lempira de Antonio de Herrera, después de descubrir en el Archivo de Indias una probanza que presentó en 1558 ante las autoridades españolas de México el soldado Rodrigo Ruiz.

El documento es de suma importancia, porque confirma la existencia real de Lempira —al que algunos hondureños de escasa fibra patriótica consideran una leyenda— el nombre del cacique (al que se refiere como El Empira), la descripción de la guerra y el escenario de la misma.

El propósito del soldado Rodrigo Ruiz al escribir esta probanza era impresionar a las autoridades españolas con el fin de obtener una pensión para los últimos años de su vida. Allí Rodrigo cuenta la hazaña de haberse enfrentado solo ante Lempira, provisto de su espada y rodela, llevando su cabeza como trofeo y recibiendo en el camino muchas heridas de parte de los indios, heridas que casi le provocan la muerte.

Aunque Rodrigo apoya su dicho con el informe de varios testigos —algunos supuestamente presenciales— no se puede confiar totalmente en el testimonio de unos compañeros de guerra dispuestos a ayudar a su amigo en un hecho de unos veinte años atrás.

Por su parte el obispo Cristóbal de Pedraza —quien se destacara por su defensa de los indígenas— en una fecha tan fresca como lo es el 18 de mayo de 1539 informa desde Gracias a los Reyes de España que a Lempira fue necesario vencerlo con ‘cierta industria’, es decir, no en combate frontal, como dice Ruiz.

Fuente: Evolución Histórica de Honduras.
Longino Becerra. (2009).
 
Cacique Lempira
 
En el occidente de Honduras, entre las altas cordilleras de Celaque y Opalaca, se extendía antes del descubrimiento, el territorio llamado Cerquín. En esta época los españoles trataban con crueldad a los indios, les quitaban sus mejores tierras, los hacían esclavos y los obligaban a trabajaban de sol a sol.

Cuando los españoles llegaron a Cerquin, el Indio Lempira estaba en guerra contra otros caciques vecinos. Pero comprendió que sus peores enemigos eran los soldados extranjeros, que habían venido a robar sus tierras y libertad. Hizo entonces la paz con sus vecinos y formó una alianza guerrera con todas las tribus que vivían en el territorio que actualmente llevan su nombre o sea, Departamento de Lempira.

El 20 de julio se ha decretado DÍA DE LEMPIRA para que todos los niños de Honduras recuerden con reverencia al indio Heroico que supo morir en defensa de la libertad de su pueblo.
Foto: En el occidente de Honduras, entre las altas cordilleras de Celaque y Opalaca, se extendía antes del descubrimiento, el territorio llamado Cerquín. En esta época los españoles trataban con crueldad a los indios, les quitaban sus mejores tierras, los hacían esclavos y los obligaban a trabajaban de sol a sol.

Cuando los españoles llegaron a Cerquin, el Indio Lempira estaba en guerra contra otros caciques vecinos. Pero comprendió que sus peores enemigos eran los soldados extranjeros, que habían venido a robar sus tierras y libertad. Hizo entonces la paz con sus vecinos y formó una alianza guerrera con todas las tribus que vivían en el territorio que actualmente llevan su nombre o sea, Departamento de Lempira.

El 20 de julio se ha decretado DÍA DE LEMPIRA para que todos los niños de Honduras recuerden con reverencia al indio Heroico que supo morir en defensa de la libertad de su pueblo.

 

 

Última actualización el Viernes, 19 de Julio de 2013 15:42
 


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